martes, 17 de febrero de 2009

La Anorexia


La Anorexia
¿Qué es la anorexia nerviosa?
La anorexia nerviosa (AN), una forma de autoprivación, es un trastorno alimentario caracterizado por un bajo peso corporal (menos del 85 por ciento del peso normal para la altura y la edad), una imagen distorsionada del cuerpo y un intenso miedo a engordar. La anorexia nerviosa algunas veces se denomina anorexia.
¿Cuáles son las causas de la anorexia nerviosa?
No se conoce la causa de la anorexia nerviosa. La anorexia normalmente comienza como un comportamiento de dieta inocente, pero gradualmente progresa a una pérdida de peso extrema y dañina. Las actitudes sociales hacia la apariencia del cuerpo, las influencias familiares, la genética, los factores neuroquímicos y del desarrollo se consideran posibles contribuyentes a la causa de la anorexia. Los adolescentes que desarrollan anorexia tienen más probabilidades de proceder de familias que tienen antecedentes de problemas de peso, enfermedad física y otros problemas de salud mental, como depresión o drogadicción. Además, a menudo los adolescentes que tienen la enfermedad proceden de familias que encuentran difícil resolver problemas de forma apropiada, son demasiado estrictas, excesivamente críticas, entrometidas y protectoras. Los adolescentes pueden también ser dependientes, inmaduros en su desarrollo emocional y es probable que se aíslen con frecuencia de los demás. Otros problemas de salud mental, como los trastornos de ansiedad o trastornos afectivos, se encuentran comúnmente en los adolescentes que tienen anorexia.
¿A quiénes afecta la anorexia nerviosa?
La incidencia de la anorexia nerviosa ha aumentado a lo largo de los últimos 20 años. Se calcula que se presenta en una de cada 100 mujeres entre las edades de 16 y 18 años de edad. Del cinco al 10 por ciento de los adolescentes a los que se les diagnostica la anorexia son varones. Inicialmente se encontró mayoritariamente en las familias de clase media y alta, pero ahora la anorexia se encuentra en todos los grupos socioeconómicos y en una variedad de grupos étnicos y raciales.
¿Cuáles son los diferentes tipos de anorexia?
Existen dos subgrupos de comportamientos anoréxicos cuyo objetivo es reducir la ingestión calórica:
Tipo restrictivo - limita severamente la ingestión de alimentos, especialmente de alimentos que contienen carbohidratos y grasa.
Bulimia(también denominada tipo comer en exceso/purgante) - come en exceso y luego se induce el vómito y, o toma grandes cantidades de laxantes u otros purgantes (medicamentos que, a través de sus efectos químicos, sirven para aumentar la eliminación del contenido intestinal).
¿Cuáles son los síntomas de la anorexia nerviosa?
A continuación se enumeran los síntomas más comunes de la anorexia. Sin embargo, cada niño puede experimentarlos de una forma diferente.
Los síntomas pueden incluir:
Bajo peso corporal (inferior al 85 por ciento del peso normal para su altura y edad).
Miedo intenso de volverse obeso, incluso cuando el individuo está perdiendo peso.
Opinión distorsionada del peso, tamaño o forma de su propio cuerpo; se ve demasiado gordo, incluso cuando su peso está por debajo de lo normal; dice sentirse gordo, incluso cuando está muy delgado.
Se niega a mantener un peso corporal mínimo normal.
En las mujeres, ausencia de tres ciclos menstruales sin otra causa.
Excesiva actividad física.
Rechaza las sensaciones de hambre.
Preocupación con la preparación de los alimentos.
Costumbres alimenticias extrañas. Los siguientes son los síntomas físicos más comunes asociados con la anorexia, los cuales a menudo son el resultado del hambre y la desnutrición. Sin embargo, cada niño puede experimentar los síntomas de una forma diferente. Los síntomas pueden incluir:
Piel seca que cuando se pellizca y se suelta no recupera su forma normal.
Deshidratación.
Dolor abdominal.
Estreñimiento.
Letargo.
Fatiga.
Intolerancia al frío.
Demacración.
Desarrollo de lanugo (vello corporal blanco y fino).
Piel amarillenta.Las personas que tienen anorexia pueden también ser socialmente introvertidas, irritables, de carácter variable y, o deprimidas. Los síntomas de la anorexia nerviosa pueden parecerse a los de otros problemas médicos o condiciones psiquiátricas. Siempre consulte al médico de su hijo para el diagnóstico.
¿Cómo se diagnostica la anorexia?
Los padres, maestros, entrenadores o instructores pueden ser capaces de identificar al niño o al adolescente que tiene anorexia, aunque muchas personas que tienen la enfermedad inicialmente mantienen su enfermedad muy privada y escondida. Sin embargo, un psiquiatra infantil o un profesional de la salud mental capacitado normalmente diagnostica la anorexia en niños y adolescentes. Una historia detallada del comportamiento del niño de parte de los padres y maestros, observaciones clínicas del comportamiento del niño y, algunas veces, un examen psicológico contribuyen a realizar el diagnóstico. Los padres que observen síntomas de anorexia en su niño o adolescente pueden ayudar buscando una evaluación y tratamiento temprano. El tratamiento temprano a menudo puede prevenir problemas futuros.
La anorexia, y la desnutrición resultante, puede afectar de forma adversa a casi todos los sistemas de órganos del cuerpo, aumentando la importancia del diagnóstico y tratamiento temprano. La anorexia puede ser mortal. Consulte al médico del niño para obtener más información.
Tratamiento de la anorexia nerviosa:
El tratamiento específico de la anorexia nerviosa será determinado por el médico de su hijo basándose en lo siguiente:
La edad de su hijo, su estado general de salud y su historia médica.
La extensión de los síntomas de su hijo.
La tolerancia de su hijo a determinados medicamentos, procedimientos o terapias.
Las expectativas para la trayectoria de la condición.
Su opinión o preferencia.
La anorexia normalmente se trata con una combinación de terapia individual, terapia familiar, modificación del comportamiento y rehabilitación nutricional. El tratamiento debe estar siempre basado en una evaluación exhaustiva del adolescente y de la familia. La terapia individual normalmente incluye técnicas cognoscitivas y del comportamiento. Los medicamentos (normalmente antidepresivos) pueden ayudar si el adolescente que tiene anorexia está también deprimido. La existencia frecuente de complicaciones médicas y la posibilidad de muerte durante el transcurso del tratamiento agudo y de rehabilitación requieren que el médico de su hijo y un nutricionista sean participantes activos del equipo de tratamiento. Los padres juegan un papel de apoyo vital en cualquier proceso de tratamiento.
Posibles complicaciones de la anorexia nerviosa:
Las complicaciones médicas que pueden resultar de la anorexia incluyen, pero no están limitadas a, las siguientes:
Cardiovasculares (corazón)Aunque es difícil predecir qué pacientes anoréxicos podrían tener consecuencias cardíacas que ponen en peligro su vida a causa de su enfermedad, hasta el 95 por ciento de los pacientes anoréxicos hospitalizados tienen el pulso bajo. El daño del miocardio (músculo del corazón) que puede producirse como resultado de cambios en el latido cardiaco, o vómitos repetidos, puede poner en peligro la vida. Las complicaciones cardiacas comunes que pueden presentarse incluyen las siguientes:
Arritmias (un latido cardiaco rápido, lento o irregular).
Bradicardia (latido cardiaco lento).
Hipotensión (presión sanguínea baja).
Hematológicas (sangre)Se calcula que una tercera parte de los pacientes anoréxicos tienen anemia (un recuento bajo de glóbulos rojos). La leucopenia (un recuento bajo de los glóbulos blancos) se produce hasta en el 50 por ciento de los pacientes anoréxicos.
Gastrointestinales (estómago e intestinos)A menudo disminuye el movimiento normal del tracto intestinal a causa de una dieta muy restringida y una pérdida de peso severa. El aumentar de peso y algunos medicamentos ayudan a restaurar el movimiento normal del intestino.
Renales (riñón)La deshidratación a menudo asociada con la anorexia produce una orina altamente concentrada. También puede desarrollarse poliuria (aumento de la producción de orina) en los pacientes anoréxicos cuando la capacidad de los riñones de concentrar orina disminuye. Los cambios renales normalmente vuelven a la normalidad al restaurarse el peso normal.
Endocrinas (hormonas)La amenorrea (suspensión del ciclo menstrual) es uno de los síntomas distintivos de la anorexia, cuando falta un período menstrual durante tres meses o más sin ninguna otra causa subyacente. La amenorrea a menudo precede a la pérdida severa de peso y continúa después de haberse restaurado el peso normal. Algunas veces se encuentran niveles reducidos de las hormonas del crecimiento en los pacientes anoréxicos, y esto puede explicar el retraso del crecimiento que algunas veces se observa en los pacientes anoréxicos. La nutrición normal usualmente restaura el crecimiento normal.
Esqueléticas (huesos)Las personas que tienen anorexia corren mayor riesgo de sufrir fracturas esqueléticas (roturas de huesos). Cuando el inicio de los síntomas de anorexia se presenta antes de que se haya logrado la formación ósea máxima (normalmente desde la mitad hasta el final de la adolescencia), existe un mayor riesgo de osteopenia (disminución del tejido óseo) u osteoporosis (pérdida ósea). A menudo se encuentra una baja densidad ósea en las mujeres que tienen anorexia, y es común la ingestión y absorción baja del calcio.
Prevención de la anorexia nerviosa:
Hasta la fecha no se conocen medidas preventivas para reducir la incidencia de la anorexia. Sin embargo, la detección e intervención tempranas pueden reducir la gravedad de los síntomas, estimular el crecimiento y el desarrollo normal del niño, y mejorar la calidad de vida de los niños o adolescentes que tienen anorexia nerviosa. Alentar los hábitos alimenticios sanos y las actitudes razonables en cuanto al peso y la dieta puede también ser de gran ayuda.

lunes, 16 de febrero de 2009

¿Cómo contrae alguien el sida?


SIDA es la abreviatura de Síndrome de Inmunodeficiencia Adquirida. Es una enfermedad que daña el sistema inmune del cuerpo (el sistema que ayuda a combatir las enfermedades). Cuando el sistema inmune de una persona está dañado, está más propensa a enfermarse por enfermedades que no le harían daño a una persona con un sistema inmune sano. El cuerpo de una persona con SIDA no puede defenderse y no puede combatir las infecciones y algunas clases de tumores.
Aunque el SIDA es contagioso, es una enfermedad mucho más difícil de contraer que un resfriado o una gripe. De hecho, es muy importante saber cómo la gente no contrae el SIDA: no puedes contagiarte por abrazar, besar o dar la mano. Tampoco puedes contagiarte por sentarte junto a alguien que tenga el SIDA o por estar en la escuela con alguien que lo tenga. No se propaga al toser o estornudar, ni tampoco pueden contagiarlo los mosquitos u otros insectos.
El SIDA se propaga cuando el virus de inmunodeficiencia humana (VIH ) se propaga desde el interior del cuerpo de una persona infectada al interior del cuerpo de otra persona. El germen puede hacer esto de tres formas:
Durante las relaciones sexuales con una persona infectada por VIH. El VIH está en la sangre de una persona infectada, el semen de un hombre infectado y las secreciones de la vagina de una mujer infectada. Algunos médicos e investigadores creen que el VIH puede pasar al torrente sanguíneo a través de cortes o heridas abiertas en la vagina, el pene, el recto (ano) y posiblemente incluso la boca. Algunos de estos cortes pueden ser tan pequeños que la persona podría no saber que los tiene.
Cuando se comparten agujas o jeringuillas con una persona infectada por VIH. Las personas que se inyectan drogas corren riesgo de infectarse por VIH — esto incluye las drogas intravenosas (drogas inyectadas en las venas), así como los esteroides inyectados. Muchas personas que emplean agujas para drogarse comparten estas agujas con otras personas que también usan drogas. Cuando una persona infectada por VIH hace esto, el virus puede propagarse a otra persona a través de las diminutas cantidades de sangre adheridas a la aguja.
De madre a hijo, antes o durante el parto. Un bebé recién nacido puede contagiarse el VIH a través de su madre si ella tiene el virus en su organismo. Esto puede suceder antes de nacer el niño o durante el parto. En casos infrecuentes, la madre puede transmitir el VIH durante la lactancia. A veces, la madre no sabe que tiene el VIH hasta que ya está embarazada. Afortunadamente, los científicos han descubierto que las mujeres con VIH embarazadas que reciben tratamiento son menos propensas a contagiar el virus a sus bebés cuando nacen. Los bebés nacidos de una madre infectada por VIH también reciben medicación para prevenir la infección por VIH.
En el pasado, algunas personas se infectaban con transfusiones de sangre infectada por VIH. Esto es muy infrecuente hoy en día — desde 1985, la sangre se examina para saber si está infectada por VIH. Si existe alguna evidencia del virus, esa sangre se desecha. Las reservas de sangre en los Estados Unidos son muy seguras.
Si no te inyectas drogas por vía intravenosa ni eres sexualmente activo, no tienes que preocuparte por contraer el VIH o el SIDA. Si en el futuro decides tener relaciones sexuales, debes protegerte siempre usando preservativos (condones) o insistiendo en que tu pareja se lo ponga. No hay forma de saber si una persona está infectada por VIH y esa persona podría no decirte la verdad si le preguntas. Los preservativos actúan como una barrera para los fluidos del cuerpo que se comparten durante el acto sexual. Sigue siempre con exactitud las instrucciones cada vez que uses un preservativo.
Si tienes más preguntas sobre el SIDA, habla con un adulto de confianza — tu médico, tus padres, tu profesor de salud, u otro profesor. No confíes en la información sobre SIDA que te den tus amigos, porque podrían no saber las respuestas correctas. Si te da vergüenza hablar con un adulto que conoces, hay muchas personas con las puedes hablar sin tener que identificarte. Busca en la guía telefónica líneas de SIDA o clínicas de salud.
Para obtener información más detallada sobre el SIDA, lee nuestro artículo para niños VIH y SIDA.